No sé qué es lo que hago mal, quizás dar demasiado.
Y no, esto no va del Karma, no va de recibir lo que devuelves, no va ni de esperar nada a cambio ni de ser agradecida o desagradecida, interesada o desinteresada.
Yo tengo claro lo que hago y porque lo hago.
Incluso en más de una ocasión he manifestado que es algo totalmente egoísta, porque me hace feliz hacer feliz.
Pero últimamente tengo una sensación brutal de estar cagandola.
Las personas a las que estoy intentando dárselo todo, solucionar sus problemas y hacer su vida más fácil, no están bien.
No está dando resultados.
Y no sé discernir dónde está el límite, la linea que separa ese apoyo incondicional y ese esfuerzo en resolver problemas y hacer su vida más fácil y ser el origen de sus problemas y no ayudar a resolver nada ni a facilitar nada.
Y me siento peor que una P.M., mucho peor.
Pero no lo puedo compartir porque entonces, en mi imaginario personal, agravo sus problemas, no sumo, resto.
Y ahí sigo yo, en un bucle infinito que se esfuerza en parecer la fuerte y ofrecer apoyo, un apoyo que no llega a ningún lugar y que siento que empeora a los demás mientras empeoró yo... Resistiéndose a hundirse porque el barco no se vaya a pique.
Porque me da miedo pensar que el barco se va a pique y, aquellos a los que tanto amo y porque quienes tanto me esfuerzo (bien o mal, pero lo intento) se hundan.
Y lo jodido es que no me importa hundirme en el intento.